juan pardo vidal [1]

"No sé cómo se llama esta piedra, no nos presentaron, tampoco necesito saber su nombre porque nunca la he llamado (no tengo su móvil). Nuestra relación se ha basado sólo en el deseo, en el breve encuentro, yo la chupo y ella también sabe salada. Siento placer al cogerla,a ella le pone que haga el ademán de lanzarla contra el cristal de la ventana, le gustan los chicos malos, y a mí poco me cuesta dármelas de intifada poética. Sé que fue ella quien me encontró a mí, y no al revés, sé que vive junto a La casa encendida en la estantería de la derecha, que ha escrito junto a mí varias novelas, libros de relatos y poemas, que ha leído a Luis Rosales tantas veces como yo, que sabe tanto de mí como yo mismo, o sea nada, pero desde hace algún tiempo sé que tengo que deshacerme de ella (o ponerle un nombre como Cari o Chati). Y en esa duda estoy Isabel, en esa duda."